
Hoy hace 35 años, un potente terremoto destruye la capital salvadoreña, el reloj marcaba las 11 con 49 minutos del día 10 de octubre, cuando el movimiento telúrico con una magnitud de 7.5 grados en la escala de Richter.
Desde ese momento los Comandos de Salvamento activaron a sus voluntarios que eran insuficientes para poder atender todas las emergencias, ya que los trabajos de rescate de víctimas se centraron en el Edificio Rubén Darío y la Escuela de Niñas Santa Catalina en el Barrio San Jacinto donde más de 40 niñas perdieron la vida.
Ahora a los 35 años de esa tragedia los Comandos de Salvamento rinden homenaje póstumo a todas esas un mil 500 personas que fallecieron en este fatídico terremoto, que destruyó la mayor parte de la capital salvadoreña.
Ahora, las nuevas generaciones de jóvenes voluntarios ofrendaron flores en memoria de todos los fallecidos.
Socorristas que día a día se capacitan para poder estar atentos con las emergencias y utilizar técnicas que acortan las tareas de rescate de las víctimas.
Posteriormente realizaron un simulacro en la plaza Morazán para demostrar la capacidad de respuesta de los rescatistas.
#61AñosAliviandoElDolorAjeno


Señoritas están capacitadas para atender emergencias.